Hoy te invito a tener paciencia en medio de cualquier circunstancia que te encuentres, no te desesperes, no te preocupes, no te inquietes, solo ten paciencia, porque cuando aprendes a esperar el tiempo perfecto de Dios, Él obrará en tu vida dándote las respuestas que necesitabas. No importa el tiempo que tengas que esperar, si lo haces con paciencia confiando en que Dios te escucha y responde, entonces obtendrás las mejores respuestas que se pueden obtener, porque la paciencia en Dios es una llave que abre las puertas de muchas bendiciones. ¡No te desesperes!, ¡Ten paciencia!. “Espera con paciencia al Señor; sé valiente y esforzado; sí, espera al Señor con paciencia.” Salmos 27:14 (Nueva Traducción Viviente)

Es hora de reconocer delante de Dios quienes somos y lo necesitados que tenemos de Él. Es hora de buscarlo porque en Él encontraremos perdón y misericordia. Te invito a ver el nuevo video de nuestro canal: Escucha la voz de Dios. “Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.” Lucas 15:18 Reina-Valera 1960.

Quizá has tocado fondo, quizá estés viviendo una de las etapas más difíciles de tu vida, observas como cada día todo se poner peor y tu fe poco a poco se va acabando. A veces quisieras huir, salir corriendo hacia algún lugar lejano, pero al mismo tiempo te das cuenta que eso no solucionará nada. Sin embargo, hoy Dios quiere hacerte sentir que está pendiente de ti, que no te ha dejado y que Él actuará en tu vida. “Escúchame, Señor, y ten misericordia de mí; ayúdame, oh Señor».” Salmos 30:10 (Nueva Traducción Viviente). A través del siguiente video Dios quiere ministrar tu vida, dedica unos minutos para verlo, estoy seguro que será de bendición para ti.

Es hora de renunciar a todo aquello que no nos deja avanzar, es hora de poner nuestra mirada en el Señor de quien siempre obtendremos ayuda, respaldo y por quien obtendremos la victoria en cada lucha que enfrentemos. "Hermanos, no pienso que yo mismo lo haya logrado ya. Más bien, una cosa hago: olvidando lo que queda atrás y esforzándome por alcanzar lo que está delante, sigo avanzando hacia la meta para ganar el premio que Dios ofrece mediante su llamamiento celestial en Cristo Jesús." Filipenses 3:13-14